Experiencia formativa a través de las lenguas originarias
Saraí Aguilar Cuenca
Licenciatura en Arquitectura
Durante el periodo otoño 2022, pude tener la oportunidad de conocer un poco a los integrantes del Programa Intercultural de Vida Universitaria Pedro Arrupe, SJ. Este Programa está dirigido a jóvenes indígenas que quieran estudiar en la Universidad Iberoamericana. Y uno de los requisitos que deben de tener es dominar su lengua originaria del lugar que provienen. Por lo que, dentro de la Universidad podemos contar con un conocimiento de diferentes lenguas indígenas.
Durante seis semanas tuve la oportunidad de asistir a las sesiones en línea del curso lenguas originarias. En cada sesión un compañero del Programa Arrupe, exponía sobre su lugar de origen. En su presentación incluían: fotos del lugar, costumbres, tradiciones, alimentos y especialmente explicación de su lengua de origen. Por lo que pude conocer un poco de seis lugares de México de los que no tenía un conocimiento previo. Y que mejor que esa explicación sea de alguien que ha crecido ahí.
Este curso, me hizo darme cuenta de que hay mucho de mi país que no conozco y eso no debería de ser así. Como mexicanos deberíamos conocer y estar orgullosos de nuestra historia, creo que deberíamos de hacer algo al respecto para no perder las lenguas originarias. Me sorprendió mucho cómo llegaron a mencionar mis compañeros, que en la escuela les pedían que no hablaran en su lengua originaria, como si fuera algo de que avergonzarse.
Creo que eso tiene mucho que ver con que somos un país colonizado. Y a pesar de que eso ya pasó hace mucho tiempo, seguimos sufriendo las consecuencias. Desde el simple hecho de que preferimos las cosas de otros países que las de nuestro propio país. O nos sentimos más orgullosos por tener algo que proviene de otro lado, mientras que nos avergonzamos de algo que tiene nuestras raíces.
Deberíamos de cambiar nuestra cultura hegemónica y enriquecernos más de lo que viene de nuestro país. Con esto no me refiero que aprender o tener algo de otros países que tienen una cultura dominante este mal. Sin embargo, deberíamos de sentirnos orgullosos de lo que hay en nuestro país. Y creo que esto es algo cultural, ya que, en el sistema educativo no implementan este conocimiento, o en general como cultura no tenemos tanto conocimiento de las lenguas indígenas.
Puedo ver que esto no solo pasa con las lenguas indígenas, yo como futura arquitecta, lo puedo ver en la arquitectura. Somos un país con pirámides impresionantes, con un gran avance constructivo para su equipo. Sin embargo, con la llegada de los españoles, México empieza a imitar estilos de otros lados, especialmente de Europa, hasta hoy en día. Por ejemplo, Puebla es una ciudad barroca y tiene mucha elegancia, sin embargo, el estilo barroco no proviene de aquí sino de Europa. Y seguimos con eso mismo, el tratar de imitar lo que hacen otros países y nos olvidamos de que nosotros tenemos un gran potencial y una gran riqueza cultural, que a veces menospreciamos o no le damos la importancia que se merece.
Octavio Paz mencionaba “Con cada lengua que se extingue se borra una imagen del hombre”. Mientras escuchaba las presentaciones de mis compañeros se me venía a la mente está frase. Y me alegraba que hubiera personas que saben y nos comparten de su lengua. Me pareció algo muy bonito, incluso me generó sentimiento que nos compartieran un pedacito de su lengua e hicieran actividades con nosotros.
Creo que nunca paramos de aprender y esta experiencia me hizo darme cuenta de que hay un área muy bonita, de la cual yo no sabía nada y que sería de mucho valor para mí desarrollarla más, que son las lenguas indígenas. Sin duda, el siguiente semestre estaré en algún taller de lenguas originarias, aprendiendo de mis raíces y espero en un futuro poder compartir ese conocimiento.