Dialogo y autoconocimiento, experiencias del PLIUL
Contratiempo
Pese al momento atípico que se vive en la actualidad, que ha obligado que muchas actividades de la universidad se desarrollen de manera virtual, el Programa de Liderazgo Ignaciano Universitario Latinoamericano (PLIUL) ha logrado mantenerse como un espacio de diálogo y autoconocimiento para los y las estudiantes de la IBERO Puebla, afirmaron Miroslava Jocelyn Navarro Huerta y Mariana Marín Mendoza, participantes de esta edición del diplomado.
Por un lado, Mariana, estudiante de séptimo semestre de Relaciones Internacionales, compartió que participar en el PLIUL le ha servido para conocerse más a sí misma, lo cual, dijo, también le ha ayudado a tomar conciencia de su entorno.
“Es un espacio que te orilla a ser muy sincero contigo, hasta cuando te resistes a aceptar ciertas cosas o a profundizar en algo, eso ya te está diciendo algo”, comentó.
Reconoció que esta es la primera vez que participa en alguna de las actividades del Programa Universitario Ignaciano (PUI), y que le ha ayudado a acercarse no sólo a otras compañeras y compañeros de la universidad, sino a ver el mundo desde otra perspectiva.
A diferencia de espacios de formación académica, describió, cada semana se presentan temas diversos para que los y las participantes reflexionen, lo cual además los invita a reconocer que en el mundo pasan muchas cosas, y que “muchos estamos pasando por situaciones difíciles”.
Es por medio de esta reflexión de la actualidad y del autoconocimiento que las y los estudiantes pueden buscar formas de involucrarse activamente en la sociedad, sin importar la carrera que estudien, señaló.
Y pese a que las sesiones semanales se llevan a cabo de manera virtual por la situación que se vive por la pandemia por COVID-19, Mariana se dijo agradecida de que se ha logrado construir un espacio seguro en el que las y los jóvenes pueden relacionarse, mostrarse vulnerables y abrazarse, pese a la distancia.
Una experiencia similar narró Miroslava, alumna de séptimo semestre de Psicología, al lamentar que, si bien entró a la IBERO Puebla porque le interesaban los espacios de formación ignaciana, fue hasta ahora que pudo participar en uno de éstos.
“El hecho de que una escuela te pueda dar bases humanistas creo que hace la diferencia, no sólo que tengas una formación educativa estructurada, sino que te enseñen a tratar a la persona, que tengas empatía, contacto con la realidad y que no te quedes solo con lo que crees que es tu realidad”, puntualizó.
Agregó que, dada la modalidad de las sesiones, se da la oportunidad a las y los participantes de expresarse de manera libre, y se les deja ser sí mismos, “no hay respuestas buenas o malas, eres tú”, lo cual ayuda al autoconomiento de cada una y uno.
“El PLIUL trabaja en eso, conocerte a ti mismo, conoce tus virtudes, lo que amas, conoce tus defectos, tus fallas y más que nada acéptate, y cómo con todo eso bueno y malo puedes salir al mundo y aportar”, explicó.
Dado este trabajo de introspección, Miroslava dijo que más que invitar a que todos se sumen al PLIUL, esto es algo que debe nacerles de manera personal, y más bien llamó a sus compañeras y compañeros a preguntarse por qué eligieron entrar a la IBERO, y que eso les marcará la ruta de a qué programas y actividades se pueden sumar.
Son 21 estudiantes de diferentes carreras quienes participan en esta edición del PLIUL, el cual se inició en agosto y terminará hasta mayo de 2021.