Muro de la esperanza
Rosa Itzal Guerra Caporal. Licenciatura en Psicología
María Fernanda González Cano. Licenciatura en Psicología
Los días de marzo previo al 8M y posterior, cada año se van sintiendo distintos, cada vez hay más mujeres que se suman, ya que no solo han vivido violencias, sino que las han reconocido, esto último ha sido un gran paso para la movilización que se ha dado en los últimos años, el transitar esto no es nada sencillo tiene un impacto emocional una mezcla de dolor, rabia, enojo, frustración, miedo y ante eso también nos preguntamos: ¿Qué hacemos con esos sentimientos que nos rebasan? ¿y yo qué hago ante tanto dolor?
La diversidad de feminismos traza líneas de acción para poder posicionarnos y tomar una postura del mundo que queremos construir, al menos el feminismo que nosotras queremos militar es un feminismo que apueste por la vida digna de todas, contemplando y priorizando aquellas que han vivido desigualdades sistemáticas. Por eso ante esa rabia y dolor, nos toca desde los espacios universitarios mostrar caminos donde podemos abrazar nuestro dolor en comunidad y eso puede significar entre muchas cosas, la esperanza.
Hacer un muro de la esperanza el 7 de marzo en la Universidad Iberoamericana Puebla surge de dos momentos clave, uno de ellos en un campamento jesuita y el otro tras una charla con el Rector de la Ibero Torreón, el Mtro. Juan Luis Hernández Avendaño en una sesión del Diplomado de Liderazgo Universitario Ignaciano, ambos con una característica en particular, mirar la catarsis humana y ante la desolación seguir creyendo y apostando por mirar hacía un horizonte de amor y encuentro.
Por eso como ciudadanas y futuras psicólogas, creemos importante denunciar las injusticias estructurales hacía nosotras las mujeres, pero también como lo apunta Hernández (2020) nos corresponde anunciar las buenas noticias de nuestro tiempo, más aún en una Universidad Jesuita y bajo una campaña del Cuidado Personal al Colectivo, así lograremos identificar las pedagogías de la esperanza y esta actividad a través de mensajes que ha logrado puntualizar la narrativa que nos moviliza.
La esperanza en esta ocasión tomó el rostro de personas, una de ellas es Kenya Cuevas quien fue invitada al podcast “Transformando realidades” y de todas las personas que la acompañaron y escucharon su testimonio.
Al finalizar visitó el muro de la esperanza, ese gesto fue directo al corazón y un verbo encarnado, fue un acto simbólico, después de escuchar su mensaje sobre el amor como factor primordial y principal motor, ella lanza una pregunta que te invita a cuestionar y reflexionar ¿cómo vas a querer vivir tu vida, quedándote en el mismo lugar de violencia o auto violencia, o decidir avanzar.?
En el muro dejaron mensajes que te hacen sentir acompañada “Hay personas que te aman y te seguirán apoyando, la violencia que viviste no te define. ¡Fuerza leona!”- Alumna de la Ibero: “Si no has hablado hazlo cuando te sientas lista, siempre habrá alguien que te apoye.”-Alumna de la Ibero
Tras leer los mensajes encontramos varios puntos que las alumnas, alumnos y alumnes dejaron en el muro de la esperanza, construyendo así una narrativa alentadora que sale directo del corazón hacia otro, otra, otre, y nos permite mirarnos desde la validación y una dignidad con la frase “Yo sí te creo”.
Fue una actividad que nos permitió visibilizar la otredad, entre frases como “Resiste corazón.”, “Resignifica lo que haya sucedido,”, “Juntas nuestra voz es más fuerte.”, “Todas unidas brillamos más” encontramos fragmentos de nuestras historias que en este momento dan sentido en el caminar pues nos reconocernos a través de ellas, se visibiliza que, al acompañarnos ante el dolor, las injusticias y la resistencia en comunidad, no vamos solas y eso resulta ser sanador.
Nos permitió un espacio de encuentro libre, en medio de una semana que significa mucho movimiento a nivel personal, una semana de lucha, de resistencia, por lo que uno de los objetivos principales era tener un espacio en donde pudieras pasar y leer algo que le viniera bien al corazón, un encuentro que permite ternura, una caricia al corazón en medio del dolor:
- “Hermana: yo te miro, yo te escucho y con mi corazón abrazo tu lucha. Te acompaño. DDU”
- “Perdón si alguna vez mi ignorancia racional te ha hecho sentir inseguridad emocional, estoy en proceso de entender que también puedo sentir lo mismo que tú sientes- Ingeniero biomédico.”
- “Aunque hay mucho que no entiendo, quiero hacerles saber que las acompañó y las apoyó. Su lucha, es la lucha para toda la humanidad”
Encontramos fragmentos de nosotras en cada historia, “Nada es más fuerte que una mujer que se ha reconstruido a sí misma” es por eso que agradecemos a Kenya su visita, nos permite profundizar el mensaje e ir más allá de las palabras, nos regala ejemplo de la esperanza puesta en acciones, “Sigamos habitando lugares de amor, rebeldía, sororidad y acompañamiento cada vez es más la gente consciente de la violencia hacia las mujeres.”, y gracias a ti hermana, hermane, porque también encarnaste la esperanza “En la creación de vínculos está la fuerza de la resistencia.”, “Ya no cuentan con la comodidad de mi silencio.” y hay una comunidad que te sostiene, con estas últimas palabras cerramos este escrito, dejemos que la esperanza nos abrace, sostenga en momentos de oscuridad y de dolor, resiste corazón, todo lo que viene desde el amor es revolucionario.
“Ser fuego por las que nos arrebataron, refugio para las que están y promesa para las que vienen. – GD”
Referencias
- Hernández, Juan Luis (2020) Geopolítica de la Esperanza: construyamos una praxis para afirmar la vida y la justicia. Programa Latinoamericano de Tierras.
- Mensajes de alumnas de la Universidad Iberoamericana Puebla, tras el Muro de la esperanza en las actividades del 8M