La experiencia que cambió mi vida
Marlene Socorro Herrera Huerta
Ex alumna de Comercio Exterior y Aduanas
Al entrar en el Taller de Creación Literaria nunca imaginé un presente con muchos frutos. Ha sido la mejor decisión de mi vida. Pues lo que yo consideraba una vida sin sentido, se convirtió en una vida con propósito. Inicié en otoño del 2004, desde entonces, he tenido tres diferentes profesores. El primero Carlos Ríos, quien era de origen argentino; Alejandro Badillo, mexicano y Gunter Petrack, también mexicano. Ellos, han sido el pilar de mi formación. Con ellos, he aprendido mucho y el resultado más sorprendente, es ya haber publicado mi primer libro a principios de este año (2024). Este logro es una muestra de cómo he aplicado todo el conocimiento acumulado con grandes profesores de este taller a través de los años.
Escribir representa para mí una historia de encuentro personal, si supieran como ha sido todo eso, no me lo creerían. Todo empezó por enfermarme gravemente, me dio una depresión profunda, seguido de esquizofrenia y finalmente fui diagnosticada con bipolaridad. Con estos diagnósticos tomé la decisión de salirme de la Universidad. Sin embargo encontré espacios de expresión como el Taller de Creación Literaria donde podía seguir aprendiendo. Han pasado ya 20 años desde que entré por primera vez a este lugar, donde descubrí que soy una aficionada a la escritura.
Los primeros diez años fueron muy difíciles para mí, pero los otros diez años, han sido lo mejor de todos. Colaboré con el periódico de la Universidad: Contratiempo, de igual manera colaboré en la revista que llevaba por nombre Notibero. Ese mismo año fue el terremoto de Haití, por lo que mis colaboraciones se inspiraban en los acontecimientos. Después tuve la oportunidad de escribir en la Revista Alianza, durante tres años consecutivos. Y actualmente tengo la oportunidad de publicar en revistas digitales como: Radio Atmósfera, Consultario y Revista Noticias del Reino.
En otras publicaciones como la revista Soy Mujer, he compartido mi testimonio de vida, donde puedo hablar de mi enfermedad y cómo mi fe y la escritura han sido un espacio para conocerme y mejorar mi autoestima, hoy en día me siento plena porque con el tiempo logré publicar mi primer libro titulado: Encuentro con Dios.
Así que finalmente les quiero invitar a ver la vida como el juego de la rueda de la fortuna, estarás arriba y luego abajo, pero lo más importante es mantenerse. Y también como una montaña rusa, tendrás momentos duros y otros muy felices, pero debemos encontrar un equilibrio total.
Mi vida tuvo un propósito al entrar en este taller, pues aquí comencé a cosechar frutos. Aprendí a hacer poesía, conocí mejor los diversos géneros literarios, e incluso a través de juegos sintácticos entendí mejor el arte de la redacción, con ello pude expresar de otra manera la experiencia de tener una enfermedad y narrar mis propias emociones por lo que escribir ha sido para mí un proceso terapéutico.
Nunca olviden cómo una decisión puede repercutir en un futuro prometedor, y aunque hay obstáculos, pues tampoco diría que fue fácil llegar hasta aquí, puedo decir que buscando las oportunidades correctas, puedes transformar tus sueños en una realidad. Así que dense la oportunidad de tomar talleres artísticos de la Universidad, porque no saben lo que el futuro les puede deparar.